• ¿Es seguro y razonable creer en lo que enseña la Iglesia?¡Claro, que es seguro! Su Doctrina es razonable mediante la Fe. La Iglesia es la que mueve la voluntad de Dios a todos los Hombres, sin ella, la voluntad de Dios no existiría en la voluntad de los Hombres. Cuando se encuentra un ser sujeto a la voluntad individual, prácticamente se convierte en un ser egoísta y asocial, en cambio, si se sujeta a la Voluntad de Dios plasmada en la Iglesia, se convierte en un ser entregado a los demás por voluntad de Dios, y con su Amor puede lograr grandes beneficios para la Humanidad. Como lo han demostrado sus Apóstoles, Santos y Mártires. Quién de nosotros no se siente agradecido por ejemplo, con: Los Santos del cumen de la Educación, de la Ciencia, Cultura y Fe, Artes, Astronomía, etc. Es una realidad tangible los frutos de la Iglesia.
“Porque así como un cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe que no produce obras está muerta”.1
• En el fondo, ¿cuál es la diferencia substancial entre un católico y un protestante?El católico deposita su Fe en el mismo Cristo Jesús Sacramentado y Encarnado, no en los Hombres.
• ¿Por qué creemos en la Iglesia?Porque es un cuerpo ¡vivo! y como tal, tiene todas sus dimensiones, formas y estructuras; no necesitamos probar su existencia, ni su veracidad. Es el mismo Dios hecho Hombre en la Divinidad de Jesús, quién erigió sus bases para su renovación constante por medio de sus Apóstoles, y; fue Él mismo Dios quién instauro su dogma, depositando su confianza en la elección de un Apóstol para su administración sacramental, el primero Pedro, que significa: Piedra. Sobre él levanto la iglesia, la elevó y convirtió en un templo sagrado para Él.
• Si la fe es tan razonable ¿por qué existen personas que no creen?Las heridas cuando son profundas y generacionales, no sólo requieren de caridad y comprensión humana, sino, de un infinito Amor que logre sanarlas. Sólo Jesús es quién puede sanar esas grandes heridas, sólo Él, nadie más.
Las personas heridas en lo básico e instintivo de su ser, requieren de mucha valía para salir de cualquier zona de confort que encuentran en el transcurso de su vida. Es allí en dónde se hace fuerte el sentimiento de renuncia a lo que les brinda seguridad, no confundir la seguridad con el placer.
Renunciar a esa seguridad, les abre puertas que ellos temen abrir, y, Jesús toca esas puertas precisamente con sus enseñanzas. Entonces es más fácil permanecer heridos pero seguros, que sanos pero inseguros de lo que se tiene por no ser tangible. Es un trabajo personal (sobre el cultivo de la Fe) que muchos no desean pactar. Por ejemplo: En mis cortos años como miembro activo en la Iglesia, me he encontrado con la recurrente expresión y sentimiento, hacia los Católicos –Si ellos quieren cargar con el mal de la humanidad y morir así crucificados, que lo hagan, ¡total, a mi ni me va ni me viene! allá ellos con eso- o otra más cómoda todavía –Bueno ella decidió cargar con mi cruz, que se la cale* (aguante, soporte, cargue). Expresión de una madre (Testigo de Jehová) de crianza, que; abandono a un joven en la adolescencia, al cual encontró a los 2 meses en un basurero, para entonces ya le estorbaba; porque el sustento que llevaba a la casa no le alcanzaba.
En base a este criterio y experiencia, sostengo que algunos no creen y se cierran a creer “por miedo a perder aquello que los conforta en su dolor”; así sea un paliativo.
*Expresión de vulgo.
1. Stgo. 2, 26