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javi30 escribió:Hola Jose, la Paz este contigo
A mi modo de ver es una jugada estrategica. Es una especie de psicologia inversa. Ellos te dicen que le preguntes al Padre si ese libro es verdadero para que pienses: "si ellos me dicen esto, es porque no tienen nada que ocultar". Entonces terminas no haciendo a Dios esta pregunta, y terminas creyendo en que sí es veridico.
Tal vez parezca inocente, pero a una persona poco culta esto lo enrreda y lo confunde.
Y en mi opinion, no es mas un "evangelio" distinto al de Cristo.
Dios te bendiga.-
Petrus Paulo escribió:Es un recurso muy útil el que usan, verdaderamente lo has experimentado, pues no lo compartirías de no ser así. Sabrás mejor que nosotros acerca de ellos, que no hay legitimidad, que no existe una verdadera transmisión, y que sus libros son compuestos de otros, a decir de el libro del Mormón, doctrinas y convenios, la perla de gran precio, en los cuales incorporan argumentos bizarros, pues son extractos de diversos libros de muy distintas corrientes ideológicas, y tienen cuestiones tan sin sentido como el teorema de Kolob y otras exposiciones, sin sustento histórico, lo único que tienen y de ahí que sea peligroso, es aquel pasaje en las arboledas, donde su seudo-profeta, tiene la visión del Padre y del Hijo, la cual le sobrevino después de orar intensamente como lo recomienda Santiago en su Epístola, cuando te dicen: 'Ora y pide', están citando aquella parte. Sabes lo que tienes, que hemos recibido de Dios y siendo Cristo la Palabra del Padre en Él nos ha dicho todo.
Petrus Paulo escribió:Es un recurso muy útil el que usan, verdaderamente lo has experimentado, pues no lo compartirías de no ser así. Sabrás mejor que nosotros acerca de ellos, que no hay legitimidad, que no existe una verdadera transmisión, y que sus libros son compuestos de otros, a decir de el libro del Mormón, doctrinas y convenios, la perla de gran precio, en los cuales incorporan argumentos bizarros, pues son extractos de diversos libros de muy distintas corrientes ideológicas, y tienen cuestiones tan sin sentido como el teorema de Kolob y otras exposiciones, sin sustento histórico, lo único que tienen y de ahí que sea peligroso, es aquel pasaje en las arboledas, donde su seudo-profeta, tiene la visión del Padre y del Hijo, la cual le sobrevino después de orar intensamente como lo recomienda Santiago en su Epístola, cuando te dicen: 'Ora y pide', están citando aquella parte. Sabes lo que tienes, que hemos recibido de Dios y siendo Cristo la Palabra del Padre en Él nos ha dicho todo.
Petrus Paulo escribió:Lamento la interpretación para la que se presto, disculpa. Ahora, tu inquietud es simple, ciertamente no están ellos en la Fe cierta, —pero no todos ellos—, tienen mala intención, sucede como entre nosotros, los hay honestos y quien no es honesto.
Una vez un maestro llamo por tiempos al director y al conserje, para participar en actividades de clase, cada uno, a una hora distinta se presento, el maestro realizo un truco, el director, un hombre muy preparado, cayo en el engaño, mientras que el conserje, sin tener una formación académica tan impresionante no fue engañado, la condición para ello, fue en palabras de mi maestro: '¿que tanto crees que sabes?'
Bendiciones +
javi30 escribió:Excelente Albert!!!!
Es como lei en algun lado, con la tentacion no se dialoga, cuando se dialoga con la tentacion, nuestra fortaleza se debilita.
Dios te colme de bendiciones
En efecto, dice el Señor: «Sed perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto» (Mt 5, 48). ¿Pero quién podría llegar a ser perfecto? Nuestra perfección es vivir como hijos de Dios cumpliendo concretamente su voluntad. San Cipriano escribía que «a la paternidad de Dios debe corresponder un comportamiento de hijos de Dios, para que Dios sea glorificado y alabado por la buena conducta del hombre» (De zelo et livore, 15: ccl 3a, 83).
BENEDICTO XVI
ÁNGELUS
Plaza de San Pedro
Domingo 20 de febrero de 2011
Ya no los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre.
San Juan 15, 15
Tampoco tiene nada de malo preguntarle a Dios sobre cualquier cosa, ni tiene nada de malo preguntar en particular a la Persona del Padre. De hecho, si le preguntas al Hijo, ya también le preguntaste al Padre, pues lo que el Hijo nos da a conocer es lo que Él mismo ha oido del Padre
Hay que subrayar que la malicia no necesariamente está en quien insiste que se haga la pregunta
albert escribió:Hay que subrayar que la malicia no necesariamente está en quien insiste que se haga la pregunta
La maldad está en la pregunta inherente, aunque no en la culpa de quien la hace, como dices, no necesariamente. Pero eso lo desconocemos, así que solo prevenimos de la inherencia de esa maldad. Entonces la pregunta concretamente no la hemos hecho desde la fe con anterioridad, pues supondría esa maldad inherente, una duda de fe, al menos no en los que nacimos en esa fe. Eso puede ser posible en los que están en proceso de conversión atraídos a la Verdad de la fe, y que estaban en otra denominación de fe. Los que nacimos en la fe verdadera desde el Bautismo no nos hicimos esa pregunta ni ninguna otra, nosotros crecimos en el conocimiento paulatino de la fe desde el Catecismo Básico, las Homilías, la catequesis de confirmación y toda la formación que viene posterior a ésta. Esto sin mencionar el conocimiento extrínseco que se supone de la Gracia otrorgada por los Sacramentos. En ese conocimiento siempre supimos que la Verdad está en la Iglesia Católica. No digo con esto que estés equivocado, solo digo que podría verse como indiferencia, y sobre esto no podemos ser ambivalentes. Si ya estamos en la fe y se nos inciste en preguntar a Dios sobre la veracidad del libro de mormón, con solo consideralo posible estamos cayendo en una duda de fe, no podemos permitirnos eso. Dios te bendiga.
Luego Moisés y Aarón reunieron a la asamblea frente a la roca, y Moisés lees dijo: «¡Escuchen, rebeldes! ¿Podemos hacer que brote agua de esta roca para ustedes?».
Y alzando su mano, golpeó la roca dos veces con el bastón. El agua brotó abundantemente, y bebieron la comunidad y el ganado.
Pero el Señor dijo a Moisés y a Aarón: «Por no haber confiado lo bastante en mí para que yo manifestara mi santidad ante los israelitas, les aseguro que no llevarán a este pueblo hasta la tierra que les he dado».
Números 20, 10-12
Y rematamos entonces diciendo: "y NO tengo intención alguna entonces de rechazar al Padre Celestial que envió a Nuestro Señor Jesucristo a quien he escuchado, como Él lo dijo, por medio de SUS Apóstoles en SU Iglesia".El que los escucha a ustedes, me escucha a mí; el que los rechaza a ustedes, me rechaza a mí; y el que me rechaza, rechaza a aquel que me envió».
San Lucas 10, 16
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