por martha salim naime » Lun May 07, 2012 7:50 am
Hola!
Antes de responder la pregunta me gustaría comentar mi experienciarespecto a leer enciclicas o documentos papales.
"Tuve" que empezar a hacerlo en mi formacion en el Instituto Juan Pablo II y me di cuenta de que solo había que perderles el miedo. A la fecha ya he leido algunos, y les comparto que me sorprende su actualidad, tal como lo,dijo Hini, parece que fueron escritas ayer. Algunas son mas profundas que otras y no es facil leerlas de corrido. Hay temas que invitan a una reflexión antes de continuar.
Regresando a nuestro tema del turismom religioso.
Yo elegi el numero 6, por la relacion que encontre con nuestro tema de Basilicas en Roma y el Vaticano.
De los dos parrafos me quedo con la frase que dice:
[quoteNuestra augusta ciudad, Sede del Pontificado, la cual sacó de ellos el mayor fruto y la singularísima ventaja de llegar a ver, no sólo el inexpugnable alcázar de la fe, sino también el asilo de las bellas artes, morada de la sabiduría, admiración y envidia del mundo. ][/quote]
[quote]6. Italia y el Romano Pontífice
Los insignes beneficios que se derivaron de la Sede Apostólica a todos los puntos del globo, los ponen de manifiesto los ilustres monumentos de todas las edades; pero se dejaron sentir especialmente en la región italiana, la cual cuanto más cercana a dicha Sede Apostólica estaba, tanto más abundantes frutos recogió de ella. Italia debe reconocerse, en gran parte, deudora a los Romanos Pontífices de su verdadera gloria y grandeza, con que se elevó sobre las demás naciones. Su autoridad y paternal benevolencia le han protegido no sólo una vez contra los ataques de sus enemigos, y le han prestado la ayuda y socorro necesarios para que la fe católica fuese siempre conservada en toda su integridad en los corazones de los italianos.
Apelamos especialmente, para no ocuparnos de otros, a los tiempos de San León Magno, de Alejandro II, de Inocencio III, de San Pío V, de León X y de otros Pontífices, con cuyo auxilio y protección Italia se libró del horrible exterminio con que la amenazaban los bárbaros, conservó incorrupta su antigua fe, entre las tinieblas y miserias de un siglo menos culto, nutrió y mantuvo viva la luz de las ciencias y el esplendor de las artes. Apelamos a esta, Nuestra augusta ciudad, Sede del Pontificado, la cual sacó de ellos el mayor fruto y la singularísima ventaja de llegar a ver, no sólo el inexpugnable alcázar de la fe, sino también el asilo de las bellas artes, morada de la sabiduría, admiración y envidia del mundo. Por el esplendor de tales hechos, que la historia nos ha trasmitido en imperecederos monumentos, fácil es reconocer que sólo por voluntad hostil y por indigna calumnia, a fin de engañar a las muchedumbres, se ha podido insinuar, de viva voz y por escrito, que la Sede Apostólica sea obstáculo a la civilización de los pueblos ya a la felicidad de Italia. [/quote]
Saludos
Martha