enrique_ellena escribió:Me pareció muy interesante este articulo y apropiado con el tema que estamos analizando, razón por la que lo comparto con Uds.
Padres, sepan escuchar a sus hijosPadres, escuchen a sus hijos. Los hijos continuamente están mandando mensajes de que quieren y necesitan ser escuchados, no sólo ser oídos. Mensajes que suelen ser enviados con el lenguaje corporal, con su comportamiento bueno o malo, utilizando a otros integrantes de la familia, etc. Piden continuamente un tiempo íntimo para poder preguntar, pues tienen demasiadas cosas para decir.
Cuando los padres no les conceden ese tiempo, aunque desgraciadamente sea algunas veces muy corto, se encierran en si mismos y ya no quieren saber nada de abrir su boca, para explicar sus inquietudes. Posteriormente vienen los lamentos de los padres, aduciendo que sus hijos no son comunicativos, pero no se habían dado cuenta, de que llevaban mucho tiempo pidiendo unas migajas de convivencia con sus padres, para que les escuchen.
Padres, estén muy atentos a cualquier señal, por muy pequeña que sea, que sus hijos quieren ser escuchados. Ofrézcanles todo el tiempo de calidad que puedan darles, para poder escucharles bien, con atención, sin prisas, ni agobios. El tiempo de calidad no es completo, si no está acompañado de unos buenos espacios para escuchar. Llevarles al cine o, al campo de fútbol, etc. lleno de ruido y con la atención puesta en lo que sucede externamente, está muy bien, pero no es lo mismo, que estar en un sitio privado de la casa, llevarles a un restaurante o a pasear al campo, para poder escucharles con detenimiento, pues escucharles es mucho mas, que simplemente oírles teniendo la cabeza puesta en otra cosa. Solamente después de escucharles con atención de mente y cuerpo, es decir con los cinco sentidos muy alertas, se puede empezar un buen dialogo.
Está muy bien que los padres salgan con sus hijos a pasear, al cine, al restaurante, al campo de fútbol, a pescar, etc. pero si no aprovechan los tiempos de soledad e intimidad con los hijos, para escucharles, están cumpliendo solamente una pequeña parte de lo que debe ser laeducación integral de los hijos. Esta educación pasa por tiempos de confianza y apertura para escucharles y poder saber que es lo que quieren, lo que no quieren, sus angustias, sus alegrías, sus amores, sus problemas, sus esperanzas, sus inquietudes, sus dudas y un largo etc.
Gentileza de ESCUELA PARA PADRES
http://www.iglesia.org
Paz y bien.
Gracias por compartir ésto, Enrique. Este tema inspiró el cuarto de mis podcasts. No es sencillo hacer uno. Tengo tanto en la cabeza que a veces no sé qué hacer con ello. Asi que tomé tus palabras (citando por supuesto que son tuyas y que estás en éstos foros) y asi hice mi comentario sobre Un hijo ¿Bendición o sacrificio?
Este artículo me servirá para el de hoy. Me parece muy bueno lo que comparte monik (querida monik) y maría.
Precisamente estaba hoy preguntándome qué necesidad tengo de sufrir, soy masoquista o qué?
Tengo 2 hijos y se encuentran bien, gracias a Dios. Siempre han estado así y yo sufro por otros hijos que tienen madres, pero las tienen lejos.
Tengo 2 sobrinas que se quedaron en México cuando su mamá se fué a Estados Unidos. Yo ayudé en su cuidado y siempre traté de estar al tanto de ellas hasta la fecha. Ahora estoy lejos yo también.
Cuando entré a éstos foros suplicaba por mi hermana que está en Estados Unidos, la imaginaba sufriendo por sus hijos. Se fué para allá hace 15 años y desde entonces no ve a sus 3 hijos. Y yo me pregunto:
¿Cómo es posible que una madre pueda estar tanto tiempo sin ver a sus hijos, sin tocarlos?
Ahora el amor a mi hermana se ha convertido en rencor.
El rencor no es bueno para nadie y daña a quien lo siente y trato de no sentirlo. Me cuesta mucho porque ella y yo fuimos encargadas con mi abuelita por mi mamá para que nos cuidara. Mi madre con todo lo que pudo ser, no nos dejó sólas, nos dejó con la mejor persona que pudo encontrar en el mundo.
En cambio mi hermana se fué enojada con su esposo, pero ya son 15 años sin ver a sus hijos. Ella es ilegal allá y por éso no sale, pero yo me pregunto: ¿ a una madre la puede detener algo así?
Hoy se festeja a la Virgen del Rosario recordando la batalla que se ganó gracias al rezo del Rosario. Ella protegió a las tropas de los musulmanes y evitó que su pueblo cayera. La Virgen del Tepeyac le dijo a Juan Diego: "No estoy yo aquí que soy tu madre?"
La madre de todos nosotros, la Virgen María no nos abandona, ¿cómo nosotras podemos abandonar a nuestros hijos?
No quiero sonar como criticona, pero no puedo evitar preguntarme: ¿Cómo puede una madre vender su casa en el D.F. e irse con una de sus hijas a un lugar mejor y dejar a sus otros 3 hijos sólos?
No lo entiendo. Simplemente no puedo entenderlo. Una madre es sacrificio por amor.
Mi suegra deseaba cambiarse a otro lugar, vender su casa porque era muy grande para ella.... y no lo hizo porque ahí llegaban sus hijos, porque la mayoría de sus hijos estaban en el D.F.
Contra sus deseos de estar en un lugar mejor estaba el amor a sus hjos. Ese que no le permitía renunciar a la lucha.
Esa es una madre.
Mi abuelita unos años antes de morir se preocupaba por encargarnos con quien mejor pudiera cuidar de nosotros (y ya est<bamos grandes, casados y con hijos). Ella veía que se acercaba el tiempo de la muerte porque ella ya era mayor y trató de dejarnos en donde mejor pudieramos estar.
Recuerdo que me decía_ "ay, hija. Yo le pido a Dios que no me recoja antes de ver casados a mis hijos y a mis nietos" (ella cuidaba de los hijos de su hija que etaba en Estados Unidos)
Le preocupaba morirse y que uno de sus hijos no se casara. Ya estaba mayor y no veíamos que se uniera a nadie.
Esa es una madre.
De alguna manera yo también quiero a ésas nietas de mi abuelita porque las ví nacer y crecer, las he cuidado y las quiero. Y sufro porque están sólas sin nadie a quien recurrir con una duda. Alguien que tome provisionalmente el lugar de su madre que está lejos.
Y quiero a mis sobrinas por lo mismo.
Los hijos aunque ya tengan canas y nietos no dejan de ser nuestros hijos. ¿Cómo puede ser que pasen 15 años y no toques a tus hijos?
¿Cómo puede ser que elijas irte de tu casa para no soportar a tus nueras e irte a un lugar más tranquilo, dejando a tus 3 hijos sin nadie?
Dios bendiga a las madres sacrificadas. A las madres que dan la vida por sus hijos, que están al lado de sus hijos en la batalla de la vida.
Gracias, Virgen del Rosario por darnos arma tan poderosa, yo no dejo de orar por mis hijos y por mis hijos adoptados del corazón como llamo a mis sobrinos.