por scarlett » Mar Oct 26, 2010 10:42 pm
1. Describe de forma breve la naturaleza y finalidad de la pastoral vocacional
Su naturaleza es el conjunto de actividades espirituales y apostólicas, desarrolladas para que cada uno de los hombres y mujeres llamados por Dios pueda descubrir y madurar con la ayuda de Dios la propia vocación específica dentro de la Iglesia, según un carisma dado por Dios a una Congregación. Y su finalidad es el servicio a la persona para que sepa discernir el proyecto que Dios tiene desde toda la eternidad para dicha persona, para la edificación de la comunidad
2. ¿Cuáles son los medios de la pastoral vocacional?
la predicación directa y clara del mensaje; la catequesis sistemática y fiel; el testimonio alegre y sincero; y sobre todo, la oración confiada al Padre por su Hijo en el Espíritu y a María, modelo de toda vocación.
3. Menciona las labores fundamentales que se tienen que llevar a cabo en la pastoral vocacional, y ¿quiénes deben llevar a cabo dicha tarea.?
1. Orar convencidos de la necesidad y del gran don que supone para la Iglesia el contar con muchas y selectas vocaciones. Para ello hay que saber orar y enseñar a hacerlo.
2. Vivir conscientemente y con alegría la vocación propia, siendo cada día más fiel a la llamada de Dios, y con conciencia de ser testimonio para los demás.
3. Ayudará mucho plantear los interrogantes vitales ¿quién soy? ¿qué sentido tiene mi vida? ¿cuál es mi misión? Conscientes de que cada uno tiene una vocación en la Iglesia y contribuye positivamente a que cada joven se plantee cuál es su misión y su vocación. Cuando no domina el tema se ha de poner en contacto al joven con alguien con más experiencia (sacerdote, religioso/a).
4. Trabajar apostólicamente para ir creando en nuestras comunidades un ambiente propicio y una cultura vocacional.
5. Formar grupos de catequesis de adolescentes y jóvenes con una marcada orientación vocacional.
6. Invitar a niñas y adolescentes a participar en las actividades que se organizan con ese fin vocacional. Fomentar las experiencias de voluntariado como “pastoral de servicio” gratuito, especialmente a los más pobres y necesitados, educando para el valor del sacrificio, de la donación incondicional y gratuita, para el empeño desinteresado y para aceptar la invitación a “perder la vida.
7. Hacerse miembro de la Red de intercesores y comprometerte a rezar un día a la semana un rato por las vocaciones.
8. Colaborar económicamente con el Seminario y con las casas de formación de religiosas, en la medida de las posibilidades, para que no se pierdan las vocaciones por falta de dinero.
Y la tarea o la responsabilidad es de toda la Iglesia., Los obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos y consagradas tienen, sí, un lugar especial en esta mediación. También es tarea de los padres de familia, catequistas, educadores, profesores, especialmente los profesores de educación moral y religiosa católica, movimientos, parroquias, diócesis, etc.