por lindoro50 » Mié Sep 19, 2012 12:51 pm
Hoy en día en México y en el mundo, cada vez es más notoria la ausencia o desconocimiento de valores entre los jóvenes, sobre todo por el proceso de globalización económica y la influencia que tienen los medios de información en esta área. A lo anterior se agrega el desinterés teórico-práctico de parte de las instancias educativas, que enfaticen la importancia y necesidad de valores. Este "vacío" ha provocado que los jóvenes, influenciados por los medios masivos, adopten como sus valores fundamentales el ego, el placer, el dinero y el poder y mientras más fácil, mejor.
Virtudes como la honradez, que incluye el mantenimiento de un compromiso y nunca intentar abusar de la confianza que depositan en su persona y sus actos; la bondad (que trae incluidas al amor, la verdad y la caridad), valor supremo de la conducta mediante la cual el hombre realiza sus actos manteniendo una insobornable lealtad consigo mismo y con el prójimo; la humildad, que implica no hacer gala de los bienes o facultades y de no lastimar al prójimo con desplantes innecesarios; la solidaridad, representada por la voluntad de ayudar a los más necesitados y comprometernos en la solución de sus problemas; la amistad, a través del mantenimiento de relaciones voluntarias, sanas y duraderas, que a su vez encierran otros valores, tales como el desinterés, la reciprocidad y la independencia de diferencias sociales; la responsabilidad y el deber, valores mediante los cuales se responde con formalidad ante cualquier tipo de situaciones y se cumple fiel y oportunamente con nuestros deberes ya sean, jurídicos, sociales o morales; la libertad, como el poder para actuar y no actuar , para pensar y expresarse de tal manera, para decidir qué hacer y cómo hacerlo y la justicia una condición necesaria para que las relaciones humanas se desarrollen armónicamente en un ambiente de respeto, igualdad, rectitud y estabilidad, son algunos de los valores y virtudes que recuerdo me fueron inculcadas y que he tratado de practicar, respetar, y de transmitir a mis 3 hijos que son independientemente de sangre de mi sangre, un compromiso y responsabilidad que tengo para con Dios, la sociedad y mi comunidad.
Saludos,
Pedro Fernando Olivares E.