El sábado 27 de enero 1979 el Santo Padre Juan Pablo II llega a la Basílica de Guadalupe, en México y se postra ante la Imagen de Nuestra Madre y ora con gran fervor.
Ese mismo día Su Santidad el Papa Juan Pablo II, interrumpe la Celebración Eucaristía para decir estas vibrantes palabras: "Salve María! ¡Cuán profundo es mi gozo queridos hermanos en el episcopado y amadísimos hijos!, porque los primeros pasos de mi peregrinación como sucesor de Pablo VI y Juan Pablo I me traen precisamente aquí. Me traen a Ti, María, en este Santuario del Pueblo de México y de toda América Latina, en la que desde hace tantos siglos se ha manifestado tu maternidad."
"Te ofrecemos todo estos hijos de Dios, la Iglesia de México y de todo el Continente; te lo ofrecemos como propiedad tuya. Tú has entrado muy adentro en los corazones de los fieles, a través de la señal de tu presencia, que es tu Imagen de Guadalupe. ¡Quédate ahora y siempre en nuestros hogares, en nuestras parroquias, misiones, diócesis y en todos nuestros pueblos."
En 1990 vuelve a la Basílica de Guadalupe el Papa Juan Pablo II el día 6 de mayo, y declara Beato a Juan Diego.
En el año 2002 S.S. el Papa Juan Pablo II, celebra en la Basílica de Guadalupe la canonización de Juan Diego.
S.S. Juan Pablo II siempre tuvo una especial veneración y cariño por la Virgen de Guadalupe, nombrándole con gran respeto y cariño: "LA MORENITA"
En el Vaticano en su Capilla privada, se encontraba S. S. Juan Pablo II, con la Imagen de la Virgen de Guadalupe y se postraba ante ella a orar.
