En cuanto a esto:
PacoCristiano escribió:Y en Colosenses dice:
Col 2:16 Así pues, que nadie os juzgue en asuntos de comida o bebida, o a propósito de una fiesta, de una luna nueva o de un sábado. (¿Fiestas de guardar, domingos, cuaresmas?)
Col 2:17 Estas cosas son sombra de las futuras; pero el cuerpo pertenece a Cristo.
Col 2:18 Que nadie os anule el premio apelando a la mortificación y al culto a los ángeles, intentando penetrar en las cosas que cree haber visto, tontamente hinchado por el pensamiento de lo que realiza en su carne, (¿mortificación y cuto angelico? ¿no suena esto a la tipica mortificacion del cuerpo del catolicismo y al culto a la Virgen, santos y angeles?)
Col 2:19 y no asiéndose a la cabeza, de la cual todo el cuerpo, bien provisto y unido de articulaciones y ligamentos, obtiene el crecimiento de Dios. (la cabeza es Cristo)
Col 2:20 Si con Cristo habéis muerto a los elementos del mundo, ¿cómo es que, cual si vivierais en este mundo, os dejáis imponer ordenanzas?
(la letra negrita es mía)
...
Si te fijas, lo que el Apóstol dice NO es que no sea importante guardar ciertas cosas, sino al contrario señala que son SOMBRA DE LAS FUTURAS, es decir, es lo que NOS PREPARA a la Vida Eterna con la que Cristo nos espera.
Sino lo que el Apóstol señala es que NO es correcto JUZGAR a otros por el cumplimiento de ciertas cosas (guardar fiestas, motificaciones, culto a los ángeles, etc.). Y eso NO es distinto a lo que enseña la Iglesia.
Porque cuando la Iglesia manda ciertas cosas de esa naturaleza NO AUTORIZA a ningún fiel a juzgar sobre lo que sus hermanos cumplen o no cumplen.
Porque incluso la misma Iglesia, que manda esas cosas para señalar los mínimos de cumplimiento, como vimos en el aporte anterior, ella misma contempla casos donde, por las circunstancias particulares de la persona, NO APLICAN esos mínimos.
Por ejemplo, en caso de enfermedad, ciertamente se tienen dispensas para la asistencia a la Santa Misa, para los ayunos, etc. Y entonces tal vez ocurra que alguien, posiblemente sin saber siquiera de la enfermedad de su hermano, es decir, sin amarle y sin interesarse por lo que le sucede, se ponga a juzgarle por que no ha cumplido con el precepto de la Misa Dominical, o con cierta práctica penitencial.
Si te fijas en lo que he subrayado, eso es lo que REALMENTE el Apóstol está señalando como indebido: que uno, envanecido y sintiéndose más que los demás por su pretendido cumplimiento, se ponga a juzgar a los demás como menos porque no hacen lo que uno hace. En ese insensato juicio en realidad lo que uno demuestra es que su propio cumplimiento, aunque sea abundante, es un cumplimiento estéril y muerto, porque NO es una veradera alabanza al Señor, porque no hace las cosas para el Señor, sino las hace para la propia vanidad y soberbia, las hace para uno mismo, para sentirse mejor y superior. Y, por ello, quien así juzga a su hermano lo que demuestra es que él mismo NO CUMPLE con los mínimos indispensables que señalábamos antes. Porque el Apóstol tampoco dijo que fuera igualmente bueno o importante reservar un día o todos para darse uno importancia y culto a si mismo de manera egoista. Sino lo que había que hacer era dedicar un día o varios PARA EL SEÑOR y no para uno mismo.
Es otra manera de expresar lo mismo que el propio San Pablo señala en I Corintios 13, 3:
Aunque repartiera todos mis bienes para alimentar a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, no me sirve para nada.
No es, evidentemente, que sea malo o innecesario repartir mis bienes para alimentar a los pobres, o que sea malo o innecesario dar testimonio de Cristo, incluso hasta llegar a las llamas. Sino lo que es malo es NO AMAR. Pues es posible entregarse a las llamas o repartir los bienes sin amor, sin hacerlo por los demás haciéndolo al Señor en ellos, sino haciendo todo eso por egoismo, para envanecerse uno mismo creyéndose cumplidor, mejor, grande e importante.
Ese era el gran error de los fariseos a los que tanto criticó el Señor por fijarse mucho en pequeñeces y dejar de lado las cosas importantes que realmente expresan el amor al prójimo.
Que Dios te bendiga.
PD: Todos estos versículos son de la Biblia Serafin de Ausejo 1975, católica.
Entonces, ¿el Papa o un concilio tiene más poder que la Biblia?. Y si así fuera, ¿puede contradecir lo que dijo un apóstol, fundador de la iglesia universal?.
¡Necesito aprender!.[/quote]