II. Amor conyugal, amor humano

Este curso tiene el objetivo de difundir una norma moral exigente y severa, aún hoy día válida , que prohíbe el uso de medios que intencionalmente impiden la procreación, y que degradan así la pureza del amor y la misión de la vida conyugal.

Moderadores: pilar calva, Catholic.net, Moderadores Animadores

Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor taliagc77 » Mar Sep 28, 2010 1:37 am

1. Características del amor conyugal y ¿cómo se pueden vivir?
R. El amor conyugal para ser un verdadero amor debe ser reflejo del amor divino y por lo tanto cumplir con 4 características: Es plenamente humano, total, fiel y exclusivo, fecundo.
Y se viven sólo dentro de un matrimonio cristiano con deseos de amarse en plenitud, es decir, con un amor como acto de la voluntad, sin reserva, en tu totalida y hasta que la muerte los separe. ´Cumplir con estas 4 características muchas veces no es fácil, se requiere de actos heróicos de parte de los cónyuges y de una confianza plena en Dios

2. Analiza las bendiciones de una familia numerosa
R. Primero que nada trae bendiciones al esposo y a la esposa, ya que su amor lo han vivido plenamente y sin reserva, sin egoísmo, como acto de la voluntad lleno de amor. En una familia así, hay alegría, confianza, apoyo mutuo entre los esposos y se vive una fe plena en Dios.
Los hijos se vuelven más virtuosos por el hecho de tener que responsabilizarse por los más pequeños o ayudar en las tareas del hogar. Ven en sus padres el ejemplo del amor y confianza en Dios y por lo tanto, son capaces de ellos confiar de esa manera en Dios.
Una familia numerosa es una bendición también para la Iglesia puesto que es el seno donde se enseña a amar a Dios y es cuna de muchos Santos.

Saludos a todos mis compañeros. Talía
taliagc77
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor akuhn » Mar Sep 28, 2010 1:44 am

¿ Cuales son las caracteristicas del amor conyugal y como se pueden vivir?
El amor conyugal, que es un reflejo y tiene su fuente en el Amor Divino, tiene 4 notas fundamentales:
a) Es plenamente humano: Es sensible y espiritual. Pero ademas es un acto de la Voluntad. No se limita a la busqueda del placer sensible.
b) Es total: Se comprte generosamente todo. Esta siempre atento a satisfacer las necesidades del otro, entregandose generosamente en oblacion por el otro.
c) Es fiel: Exclusivo hasta la muerte, lo cual es dificil, pero no imposible, si se busca el apoyo de la Gracia, para cumplir la promesa otorgada de amar y respetar al otro en todas las circunstancias y hasta qe la muerte los separe.
d) Finalmente es fecundo: Destinado a prolongasrse suscitando nuevas vidas. En una disposicion total a la voluntad de Dios en su plan, sabiendonos constructores del reino con nuestra participacion en la creacion de nuevos hijos para la Iglesia y la patria terrenal.

Las bendiciones de una familia numerosa las señala Pio XII:

+ Son bendecidas por Dios
+ Estimadas por la Iglesia como preciosisimos tesoros
+ En ellas florecen espontaneamente las virtudes
+ Son santuarios donde madura la santidad ( Ejemplo de ello es el hecho de que los grandes santos han sido fruto de familias numerosas.
+ Se vive la alegria y son escuelas de convivencia donde se aprenden los valores cristianos y humanos.

Todo esto avalado por mi propio testimonio, pues mi propia familia es numerosa y bendecida por Dios.

Saludos a todos y que Dios los bendiga.
akuhn
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor Fabiola Diaz Mora » Mar Sep 28, 2010 7:54 am

Bendiciones para todos.

¿Cuáles son las caracterísiticas del amor conyugal y cómo se pueden vivir?
1 -Es humano.
2 -Total.
3 -Fiel
4 -Fecundo

1 Es humano y tambien sencible y espiritual.Es un acto de voluntad porque encierra todo el ser como persona humana y
espiritual; el amor debe ser autentico e integro es decir con su cuerpo, su pasión y alma.
No es, amor auténticamente humano y conyugal el que busca principalmente el goce sexual o carnal.

2 Es total cuando en el amor conyugal se comparte generosamente todo, sin reservas indebidas o cálculos egoístas.
No es, pues, amor auténticamente humano y conyugal el que teme dar todo cuanto tiene y darse totalmente a sí mismo, el que sólo piensa en sí, o incluso el que piensa más en sí que en la otra persona.

3 Fiel y exclusivo hasta la muerte. Es posible mantener este compromiso incluso en los casos de abandono y separación.
La fidelidad matrimonial hoy en día es uno de los valores matrimoniales más rebajados; porque no se encara la fidelidad como un don total. No puede haber fidelidad verdadera mientras no se la entienda como fidelidad cordial, mental y carnal. Fidelidad cordial, del corazón, quiere decir reservar el corazón exclusivamente para el cónyuge, y renovar constantemente la entrega que se le ha hecho la vez primera en que se le declaró el amor.

4 Fecundo cuando el amor no se agota en la comunión entre los esposos, sino que está destinado a prolongarse suscitando nuevas vidas. Fecundidad no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino a estar abiertos a la vida.
Cada matrimonio debe tener tantos hijos como su conciencia formada según las enseñanzas de la ley de Dios y de la Iglesia les dicte, manteniéndose abiertos a la vida en cada uno de sus actos conyugales.

Pregunta N° 2

Analiza las bendiciones de una familia numerosa.

Las familias que tienen varios hijos y reina un auténtico espíritu cristiano es siempre un lugar donde se goza de alegría, a pesar de las dificultades materiales que puedan pasar. Los hijos son bendiciones para el hogar, pero solo lo podemos
entender cuando estamos en el camino del SEÑOR. En estas familias cuando se da una verdadera unidad se multiplican
los dones y las vocaciones para su propio servicio y de la Iglesia.
Fabiola Diaz Mora
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor raul montero » Mar Sep 28, 2010 8:18 am

¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?

El amor de los esposos, debe ser pleno; debe ser reflejo de su fuente, el divino; debe ser considerado bajo la visión integral del hombre y de su vocación, no sólo natural y terrena, sino también sobrenatural y eterna” (HV, 7). Amar en cuerpo y alma.
Para vivirlo debe …..
Ser plenamente humano…. Carnal y espiritual
Ser total… la entrega de si mismo
Ser fiel y exclusivo hasta la muerte… fidelidad del corazón, de la mente y del cuerpo
Debe ser Fecundo… abierto a la vida , a la procreación
raul montero
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor srvallone » Mar Sep 28, 2010 9:16 am

Buena y santa noche a todos! Aquí mis respuestas al tema EL AMOR CONYUGAL, AMOR HUMANO
1) Características del amor conyugal y cómo se pueden vivir.
Primer e ineludible reflexión es cuánta ignorancia generalizada, también dentro de los cristianos, respecto nada más y nada menos que al amor. Hemos sido creados para amar, y estamos como sociedad humana errando tanto el camino por ignorar en qué consiste!
El Papa Pablo VI insiste en la Encíclica Humanae Vitae que el amor conyugal para ser auténtico debe ser reflejo del Divino, como la familia humana lo es de la Santísima Trinidad, nada menos!
Seremos juzgados al final de nuestros días en el amor, por él será salva nuestra alma para continuar amando por toda la eternidad, esa es nuestra vocación.
Las características del amor verdadero, del amor de benevolencia que llega a ser amor de amistad entre los esposos, son fundamentalmente 4:
a) Es HUMANO, a la vez sensible y espiritual, como acto de la voluntad. El hombre ama como hombre cuando ama con todo su ser. Cualquier recorte implica una profanación del amor. Las almas que se encuentran se plenifican en la entrega total de su ser para crecer en el amor y dar fruto.
b) Es TOTAL, comparte todo, sin reservas egoístas. No es posesivo sino oblativo. Es el mejor negocio y la sociedad más perfecta, ya que la felicidad de cada uno es el bien del otro.
c) Es FIEL Y EXCUSIVO HASTA LA MUERTE: no hay donación total del ser si no es para siempre, en fidelidad cordial (el corazón entregado total y renovada mente al cónyuge), mental (en los pensamientos, en la memoria y en los deseos )y carnal (manteniendo suma delicadeza y distancia en los contactos físicos con quien no sea su cónyuge).
d) Es FECUNDO, no se agota en la comunión entre los esposos sino que se prolonga en los hijos, don y bendición del matrimonio. Fecundidad es la actitud de estar abiertos a la vida, según los planes de la Providencia para cada hogar.
Todos estos bienes se conquistan, y dan la felicidad. Ante todo hay que vencer la ignorancia al respecto, superar las vanas tentaciones del mundo hedonista que la promete detrás del puro goce sensible, respetar la propia dignidad y la de las otras personas, quererse mucho procurando para si lo mejor, hacer una correcta elección (primero de estado, luego del cónyuge), practicar con denuedo siempre nuevo todas las virtudes y pedir al Señor la gracia inmensa de poder vivir la castidad como un estilo personal, contra viento y marea.
2) Bendiciones de la familia numerosa.
Las familias numerosas, que cumplen sacrificialmente con el mandato de multiplicarse y henchir la tierra, gestando más ciudadanos para el Cielo, son:
-Las más bendecidas por Dios.
-Preciosos tesoros para la Iglesia.
-Son un terreno favorable para la adecuada educación de los hijos, porque cuando en ellas reina el orden, las virtudes se viven y transmiten con naturalidad. De allí que en ellas florezca la alegría (siempre hay algo que festejar!) y madure la santidad (siempre hay algo que ofrecer, un dolor, un lugar, un sacrificio que hacer). Por aquello de que la familia es una sociedad de mutuos sacrificios gozosos (Padre Horacio Bojorge).
Hasta pronto. Sonia.
srvallone
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor srvallone » Mar Sep 28, 2010 9:18 am

Mis reflexiones sobre ¿CUÁLES SON TUS GRAVES RAZONES?
Qué bueno que alguien pierda el sueño ante la duda de no estar haciendo lo que Dios quiere!
El tema de la sexualidad es tan intrínseco a la vida matrimonial que en verdad debería ser siempre motivo de reflexión.
Soy instructora en métodos naturales y cuando comencé a leer el escrito me tensioné bastante, pero poco a poco comprendí el drama del mensaje, y solo puedo decir que concuerdo en un todo con sus argumentos . Que mundo triste este que construimos sin niños, que jóvenes envejecidos los que no se atreven a amar, que familias vacias las que no se atreven a entregarse del todo a su Señor y Creador.
Quizás el problema que plantea la autora se halle mas en el concepto de “estilo de vida
Billings”, que en la propia ética del uso adecuado de los métodos naturales. (Cosa que ella misma aclara hacia el final de su artículo).
Me chocó mucho cuando lo escuché por primera vez en un Curso de Capacitación hace años, y si he captado la descripción que de dicho estilo ha hecho la autora del escrito, me sigue espantando la idea!
Como ella dice, yo también para exponer mis ideas debo hacer un poco de referencia a mi caso personal: me casé a los 31 años con el deseo inmenso de ser madre de una familia numerosa. A los nueve meses y quince días nacía nuestra hermosa hija, por cesárea de urgencia y con el diagnóstico de cuello de útero distócico. A pesar de las sugerencias del médico, y en un todo de acuerdo con nuestra fe respecto al valor de la vida, los fines del matrimonio y la Providencia Divina, llegaron dos bellos niños más en los dos años siguientes. Tercer parto muy delicado…. Necesidad de aprender a distinguir fertilidad de infertilidad….
Pasado el tiempo recomendado encargamos a nuestro cuarto hijo, que por designios del Señor muere con cinco meses de gestación. Nueva necesidad de cuidados para definir causas….
Aprendí, practiqué y enseño métodos naturales por necesidad….. pero jamás como estilo de vida, sino como simple medio para que cada matrimonio disponga de él según necesidad: controlar o tener hijos (tengo muchos de estos ahijados felizmente!)
Se me ocurre pensar que quizás la reflexión no debería de antemano oponer vida cristiana vs. Métodos Naturales para el reconocimiento de la fertilidad, sino distinguir.
+Quizás a la autora le enseñaron y la prepararon para enseñar el método dentro de errores de concepto fundamentales. Si se lo toma como un método anticonceptivo más y así se lo utiliza, cualquier conciencia medianamente delicada tiene que entrar en conflicto. Los fines del matrimonio los aprendemos en el catecismo, y que la fertilidad y los hijos son un gran regalo del Señor, que nos acerca misteriosamente al inicio de una nueva vida, casi como co-creadores con Él, es de sentido común para un cristiano.
+Cómo casarse aplicándolo desde el principio?, como usarlo porque el hijo es una carga e implica sacrificios?...... El Magisterio es clarísimo, y si bien “ante graves situaciones….” , no está desagregado, es el matrimonio el que seriamente y en oración debe tomar la decisión de si es lícito y bueno en su situación aplicarlo, y hasta cuándo, con ayuda del director espiritual si hace falta.
+Si Dios sembró en la naturaleza femenina el ser cíclica, si nos dio la inteligencia para conocer sus leyes, si nos da a los esposos la voluntad para formarla y hacerla florecer en virtudes…. Si de verdad existen esas causas graves, cómo no usar de todas las facultades humanas para actuar con verdadera prudencia?. Dios es Providente, pero cuenta con que usemos de nuestra libertad responsablemente.
+Esta es la actitud: se hace lo humanamente posible, y se deja en Sus manos el cumplimiento de Su Santa Voluntad. Por eso es tan grandioso el que usando los métodos naturales siempre queda abierto el camino a la vida, y se acoja con ágape su llegada si habiendo puesto los medios el hijo llega. Es la sutil y gran diferencia ontológica y antropológica con los métodos anticonceptivos artificiales,( promotores del desprecio por la vida, de la negación de los derechos de Dios, de la proclamación del hedonismo en todas sus miserables formas) y los llamados naturales, siempre y cuando sean utilizados como la Santa Madre Iglesia lo manda.
+Finalmente me gustaría decir que el relato del diario de una señora que aparece en el escrito, a mi entender, no representa las vivencias de todas las usuarias del método. Sus apreciaciones son un tanto extremas. Llevo 14 años enseñándolo y en general, los matrimonios expresan su alegría de vivir la castidad sin ofender a Dios y sintiendo que obran bien (no en casos de puro egoísmo, sino cuando las causas son en verdad serias, como queda dicho), su asombro ante la armonía del cuerpo humano, el aumento de diálogo y confianza en estos temas de intimidad… y son muchas las mujeres que transmiten su sentimiento de sentirse bien amadas, respetadas y esperadas. El “ahora si”, y “ahora no”…. ,tan secamente expresado manifiesta un nivel de diálogo , al menos, poco feliz.
En todo lo demás felicito a la autora de la reflexión, ojalá todas las mujeres realicemos nuestras opciones de vida pasandolas por ese tamiz: de creaturas deseosas de amar a Dios sobre todas las cosas. Mi cariño y respeto. Sonia.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor Eddie » Mar Sep 28, 2010 9:24 am

4 caracterísiticas del amor conyugal: Humano, Total, Fiel, Fecundo.

cómo se pueden vivir? No temer. Confiar en Dios porque el no defraude.

Analiza las bendiciones de una familia numerosa.
"Un auténtico espíritu cristiano es siempre un lugar donde reina la alegría".

Vivo en Ontario, Canada. Voy a misa en inglés. El domingo pasado me fijé en una familia con cuatro hijas. Fueron escojidos para llevar las ofrendas sin saber que esto pasaría. Un señor le avisó al papá de la familia, y el papá rapidamente le avisó a su esposa y 4 hijas. Todos sin preguntar y con gran obedencia y felicidad en humildad, llevaron las ofrendas. Cuando me fijé en esto sabía que lo tenía que compartir aqui. Que bonito es tener una familia grande y tan unida, todo por guiarse por la voluntad de Dios. Esta familia es bendecida por Dios porque estan vigilantes a la voluntad de Dios. Solo de esta manera uno puede tomar una decision rapidamente.

La lectura sugerida lo considero verdaderamente una inspiración por el Espiritu Santo. El articulo ¿Cuáles son tus graves razones? es un gran tesoro. GRACIAS! Hasta lo quiero traducir en ingles para compartirlo.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor dianiquiroga » Mar Sep 28, 2010 10:29 am

Muy buenos días.
A continuación mis respuestas a las preguntas del foro:
1Rta/ las características del amor conyugal, son:
a. El amor conyugal es Plenamente Humano: es decir, depende directamente de la voluntad del hombre.
b. El amor conyugal es Total: es decir, no se reserva nada para sí mismo, lo da TODO por el otro, sin importar los sacrificios que haya.
c. El amor conyugal es fiel: es decir, da completa exclusividad al cónyuge en la vida, esto es en el corazón, en la mente y en la carne
d. El amor conyugal es Fecundo: es decir, está abierto a la vida, a los hijos que Dios quiera enviar.

La mejor manera de vivir estas características del amor conyugal, es teniendo en pareja una vida espiritual activa, en donde los sacramentos sean pilares infaltables, en donde se reserve un espacio del día para la oración y la acción de gracias a Dios.

2Rta/ las bendiciones de una familia numerosa:
En una familia numerosa, como dice el autor, abundarán siempre las bendiciones de Dios. Nunca alguno se sentirá sólo o sin apoyo en este mundo. Siemper habrá alguien con quien compartir las penas y las alegrias.
Los hijos crecen sabiendo dar valor a lo que tienen y a cuidar los bienes que con generosidad han recibido de Dios. Los hijos también aprenden a compartir todo y a dar más valor a las cosas del alma que a las materiales.
Cuando los padres envejecen, tienen más seres queridos que los cuiden y velen por ellos, tendrán a su vez más nietoa a quienes mimar. Y cuando los viejos ya no estén, entre todos los hermanos se consolarán y conservarán en su corazón para transmitir a sus hijos las enseñanzas y la fe que sus padres les dejaron.
Dios bendiga aún más a las familias numerosas!!
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor wendyarellano » Mar Sep 28, 2010 10:34 am

Buenos días en el Señor!!
Las respuestas son las siguientes:
¿Cuáles son las caracterísiticas del amor conyugal y cómo se pueden vivir?
-Plenamente humano: es decir, al mismo tiempo sensible y espiritual; por tanto, es algo distinto de “una simple efusión del instinto y del sentimiento”, porque es también y principalmente un acto de la voluntad. El hombre ama como hombre cuando ama con todo su ser: es decir, con su cuerpo, su pasión o sensibilidad y con su alma (con su voluntad espiritual).
-Total: en el verdadero amor conyugal se comparte generosamente todo, “sin reservas indebidas o cálculos egoístas”: “quien ama de verdad a su propio consorte, no lo ama sólo por lo que de él recibe, sino por sí mismo
- Fiel y exclusivo hasta la muerte No puede haber fidelidad verdadera mientras no se la entienda como fidelidad cordial, mental y carnal. Fidelidad cordial, del corazón, quiere decir reservar el corazón exclusivamente para el cónyuge, y renovar constantemente la entrega que se le ha hecho la vez primera en que se le declaró el amor. Dice Gustave Thibon: “La verdadera fidelidad consiste en hacer renacer a cada instante lo que nació una vez
-Fecundo: Fecundidad no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino a estar abiertos a los hijos.


Analiza las bendiciones de una familia numerosa.
*Es una bendición para los mismos hijos que son llamados a la vida terrena y a la eternidad
* Para la Iglesia que crece con sus hijos bautizados y también para la patria terrena. Es un dato de la experiencia que una familia que reúne al mismo tiempo una numerosa descendencia “y” un auténtico espíritu cristiano es siempre un lugar donde reina la alegría, a pesar de las dificultades materiales que puedan pasar. No está de más mencionar que muchas familias numerosas han sido cuna de grandes santos,
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor 1juan guzmán » Mar Sep 28, 2010 10:54 am

¿Cuales son las caracteristicas del amor conyugal y cómo se puede vivir?



Es: plenamente humano, total, fiel y fecundo .

Ante todo, es plenamente humano: es decir, al mismo tiempo sensible y espiritual; por tanto, es algo distinto de “una simple efusión del instinto y del sentimiento”, porque es también y principalmente un acto de la voluntad. El hombre ama como hombre cuando ama con todo su ser: es decir, con su cuerpo, su pasión o sensibilidad y con su alma (con su voluntad espiritual).
Desde este punto de vista, el “recorte” de cualquiera de las dimensiones del ser humano es un terrible enemigo del amor matrimonial. Cuando se pretende dar el afecto pero no la capacidad de procrear, se está cercenando la entrega; igualmente cuando empiezan a retacearse los afectos; cuando los esposos no se acompañan espiritualmente; cuando la unión es sólo corporal pero las almas están distantes... No es, pues, amor auténticamente humano y conyugal el que busca principalmente (menos aún si busca solamente) el goce sexual o carnal.

En segundo lugar, es total: en el verdadero amor conyugal se comparte generosamente todo, “sin reservas indebidas o cálculos egoístas”: “quien ama de verdad a su propio consorte, no lo ama sólo por lo que de él recibe, sino por sí mismo, gozoso de poderlo enriquecer con el don de sí”. La diferencia es esencial: el amor instintivo es posesivo mientras que el voluntario (espiritual) es oblativo. El animal llevado por sus instintos se mueve a satisfacer una necesidad individual; el hombre llevado por el amor espiritual se mueve a satisfacer la necesidad del otro. Pero para esto debe tener gobernado su propio deseo de goce, que debe mantener subordinado a la necesidad del otro.
No es, pues, amor auténticamente humano y conyugal el que teme dar todo cuanto tiene y darse totalmente a sí mismo, el que sólo piensa en sí, o incluso el que piensa más en sí que en la otra persona.

En tercer lugar, es un amor fiel y exclusivo hasta la muerte. “Fidelidad -dice Pablo VI- que a veces puede resultar difícil, pero que siempre es posible, noble y meritoria”. “Siempre es posible”, incluso en los casos de abandono y separación; porque aun en estos casos se puede (y se debe) ser fiel a la palabra empeñada de no amar a ningún/a otro/a que no sea el legítimo cónyuge hasta que la muerte los separe. La fidelidad matrimonial quizá sea, hoy en día, uno de los valores matrimoniales más rebajados; porque no se encara la fidelidad como un don total. No puede haber fidelidad verdadera mientras no se la entienda como fidelidad cordial, mental y carnal. Fidelidad cordial, del corazón, quiere decir reservar el corazón exclusivamente para el cónyuge, y renovar constantemente la entrega que se le ha hecho la vez primera en que se le declaró el amor. Dice Gustave Thibon: “La verdadera fidelidad consiste en hacer renacer a cada instante lo que nació una vez: estas pobres semillas de eternidad depositadas por Dios en el tiempo, que la infidelidad rechaza y la falsa fidelidad momifica”. Charbonneau añade: “el marido que deja dormir su corazón ya es infiel”.

Fidelidad cordial, positivamente, implica reiterar constantemente la entrega del corazón; negativamente, evitar todo trato imprudente con otras personas. Fidelidad mental, por su parte, es la fidelidad en los pensamientos, en la memoria y en los de-seos. El que maquina, imagina o sueña despierto, “aventuras” con otras personas, aunque no tenga intención de vivirlas en la realidad, ya es infiel, y esto prepara el terreno para la infidelidad en los hechos. Es infiel a su cónyuge quien mira o lee revistas o películas pornográficas o eróticas, quien no cuida la vista ante otras mujeres u hombres, quien asiste o frecuenta ambientes donde no se tiene el mínimo pudor en el vestir o en el hablar. En fin, fidelidad carnal es evitar el trato físico con quien no sea el cónyuge legítimo; la infidelidad carnal es siempre una profanación del cónyuge inocente, porque el matrimonio ha hecho de ellos una sola carne (cf. Mt 19,5); al entregarse uno de ellos a una persona ajena al matrimonio, ensucia y rebaja la persona del cónyuge(9) .

Es claro que la castidad matrimonial exige, para poder ser vivida, un estilo de vida y un ambiente casto(10) . Y con esto no caemos en ningún puritanismo; es simplemente lo “normal”, es decir, lo adecuado a la norma. Considero que la falta de seriedad en este punto es la causa principal de las infidelidades matrimoniales, y no se puede poner remedio a este problema si no se empieza por disolver el caldo de cultivo de toda infidelidad que es la falta de castidad en las miradas, en los pensamientos y en los deseos.

Finalmente, el amor auténticamente humano y conyugal es fecundo. Como dice Pablo VI, el amor “no se agota en la comunión entre los esposos, sino que está destinado a prolongarse suscitando nuevas vidas”. Fecundidad no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino a estar abiertos a los hijos. Hay matrimonios que no han podido tener hijos a pesar de desearlos ardientemente. Éstos, en su deseo firme y sincero, son fecundos; aunque no logren la fecundidad carnal(11) . Cada matrimonio debe tener tantos hijos cuantos su conciencia formada según las enseñanzas de la ley de Dios y de la Iglesia les dicte, manteniéndose abiertos a la vida en cada uno de sus actos conyugales. En contra de cuanto repite la propaganda antinatalista que actualmente nos atonta, en nuestros días, incluso desde el punto de vista demográfico, son cada vez más necesarias las familias numerosas(12) . Pío XII decía de las familias numerosas que son “las más bendecidas por Dios, predilectas y estimadas por la Iglesia como preciosísimos tesoros... En los hogares donde hay siempre una cuna que se balancea florecen espontáneamente las virtudes... La familia nu-merosa bien ordenada es casi un santuario visible... son los planteles más espléndidos del jardín de la Iglesia en los cuales como en terreno favorable, florece la alegría y madura la santidad”(13) . También el Concilio Vaticano II alaba a los esposos que son generosos en la transmisión de la vida: “Son dignos de mención muy especial los que de común acuerdo, bien ponderado, aceptan con magnanimidad una prole más numerosa para educarla dignamente”(14) .







Analiza las bendiciones de una familia numerosa.




Una descendencia numerosa es una bendición para los mismos hijos que son llamados a la vida terrena y a la eternidad; para la Iglesia que crece con sus hijos bautizados y también para la patria terrena. Es un dato de la experiencia que una familia que reúne al mismo tiempo una numerosa descendencia “y” un auténtico espíritu cristiano es siempre un lugar donde reina la alegría, a pesar de las dificultades materiales que puedan pasar.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor Efrain Gil Lizama » Mar Sep 28, 2010 1:13 pm

¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?

R= Las características son: Plenamente humano, Total, Fiel y Fecundo.
Se debe vivir con la conciencia de que todo nuestro ser se entrega por amor a nuestro cónyuge y lo hacemos ante Dios y este amor es santificado en el sacramento del matrimonio, por lo que se debe vivir cristianamente.

El amor se entrega totalmente, cuando cubro cada una de las necesidades de mi cónyuge que permitan su crecimiento en cada una de sus dimensiones en que se desarrolla; fortaleciendo de esta manera nuestro matrimonio y así logrando la renovación constante de nuestro amor.

La fidelidad debe ser el compromiso del amor que nace de nuestro corazón y que involucra a todo nuestro ser y al traicionar a nuestro cónyuge, traicionamos nuestro propio amor.

La fecundidad del matrimonio se vive cuando tenemos nuestros hijos, cuando tenemos un matrimonio estable, una familia unida y un espíritu de servicio.

Analiza las bendiciones de una familia numerosa:

Al tener familias numerosas Dios ha derramado sus bendiciones, siendo la familia como una pequeña iglesia donde Dios siempre está presente y estas bendiciones dan frutos en la familia y la mayor de ellas es que de la familia surjan discípulos del Señor e hijos consagrados a Dios.

Dios los bendiga.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor salvador montas » Mar Sep 28, 2010 1:56 pm

[b]¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?[/b]

El amor conyugal debe ser plenamente humano, total fiel y fecundo

a)[b]Plenamente humano:[/b] porque es un acto de la voluntad, amar es una decisión no un sentimiento, el hombre ama con todo su ser, es decir con su cuerpo , pasión y su alma.

b)[b]Total:[/b] El verdadero amor conyugal se comparte generosamente todo, sin reservas indebidas o cálculos egoístas. No es amor verdadero el que teme darlo todo cuanto tiene.

c)[b]Fiel:[/b] Esta debe entenderse partiendo de la premisa que esta debe ser cordial, mental y carnal.

d)[b]Fecundo:[/b] La relación conyugar debe tender hacia la unidad y la fecundidad, es que en el proyecto conyugal la llegada de los nuevos miembros estén siempre en los planes de la pareja. Fecundidad no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino estar abiertos a los hijos.

[b]¿Analiza las bendiciones de una familia numerosa?[/b]

Asumiendo como propia la expresión de Pío XII que decía de las familias numerosas que son “las más bendecidas por Dios, predilectas y estimadas por la Iglesia como preciosísimos tesoros... En los hogares donde hay siempre una cuna que se balancea florecen espontáneamente las virtudes... La familia nu-merosa bien ordenada es casi un santuario visible... son los planteles más espléndidos del jardín de la Iglesia en los cuales como en terreno favorable, florece la alegría y madura la santidad” También el Concilio Vaticano II alaba a los esposos que son generosos en la transmisión de la vida: “Son dignos de mención muy especial los que de común acuerdo, bien ponderado, aceptan con magnanimidad una prole más numerosa para educarla dignamente”

Una descendencia numerosa es una bendición para los mismos hijos que son llamados a la vida terrena y a la eternidad; para la Iglesia que crece con sus hijos bautizados y también para la patria terrena. Es un dato de la experiencia que una familia que reúne al mismo tiempo una numerosa descendencia “y” un auténtico espíritu cristiano es siempre un lugar donde reina la alegría, a pesar de las dificultades materiales que puedan pasar.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor marinarobello » Mar Sep 28, 2010 2:03 pm

1) "El amor conyugal para ser auténtico, debe ser reflejo de su fuente, el divino"
El amor conyugal tiene cuatro características fundamentales:
# es plenamente humano: Se puede vivir cuando los esposos se aman en cuerpo y alma.
# es total: se puede vivir cuando el amor de los esposos es oblativo, o sea que se da por completo, sin recortar ningunas de las dimensiones del ser humano.
# es fiel y exclusivo hasta la muerte: Implica fidelidad cordial, mental y carnal; excluye imprudencias en el trato con las demás personas, la pornografía, la asistencia a lugares donde reinan actitudes inmorales, entre otras cosas.
# es fecundo: se logra estando abiertos a los hijos, es decir, aceptando con generosidad los hijos que Dios envíe.

2) Una familia numerosa es una bendición para los mismos hijos que son llamados a la vida terrenal y a la eternidad; para la Iglesia que crece con sus hijos bautizados y también para la patria terrena (más almas al servicio de la Patria celestial y de la patria nacional)

A.M.D.G
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor vikartovce » Mar Sep 28, 2010 2:09 pm

¿Cuáles son las caracterísiticas del amor conyugal y cómo se pueden vivir?

El amor conyugal tiene las siguientes características:
a) Humano (amor como acto de voluntad, que no solamente sigue el instinto; abarca toda la integridad del ser humano)
b) Total (habla de la entrega total al ser amado, sin cálculos o egoísmo; es la renovación diaria del primer SÍ)
c) Fiel (compromete a la fidelidad del corazón, de la mente y del cuerpo; no invita a algo imposible, solo a lo que debería ser "normal", es decir propio de un matrimonio)
d) Fecundo (apertura a los hijos según la propia conciencia, la voluntad de Dios y las enseñanzas de la Iglesia).

Analizando las bendiciones de una familia numerosa:

Son muchas las bendiciones de una familia numerosa, ya que se puede convertir en el verdadero seno de valores y virtudes, como la generosidad, caridad, convivencia, modestia, etc. Es un auténtico camino hacia la santidad para todos los miembros de esta familia. Es una bendición de Dios, aunque pienso que también es una vocación de Dios.
Al final, una familia numerosa es un don para los mismos hijos, para la Iglesia y para la sociedad.

Buen día a todos.
vikartovce
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor PATTY_30 » Mar Sep 28, 2010 2:50 pm

¿Cuáles son las caracterísiticas del amor conyugal y cómo se pueden vivir?
plenamente humano, total, fiel y fecundo

Analiza las bendiciones de una familia numerosa.
Una descendencia numerosa es una bendición para los mismos hijos que son llamados a la vida terrena y a la eternidad; para la Iglesia que crece con sus hijos bautizados y también para la patria terrena. Es un dato de la experiencia que una familia que reúne al mismo tiempo una numerosa descendencia “y” un auténtico espíritu cristiano es siempre un lugar donde reina la alegría, a pesar de las dificultades materiales que puedan pasar.
PATTY_30
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor lore857 » Mar Sep 28, 2010 3:30 pm

[b]¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?[/b]

Las características del amor conyugal son:
Principalmente debe [b]ser reflejo del amor divino[/b]. A partir de esto tiene 4 características fundamentales:
[b]Plenamente humano:[/b] es decir, al mismo tiempo sensible y espiritual; por tanto, es algo distinto de “una simple efusión del instinto y del sentimiento”, es un acto de la voluntad. El hombre ama como hombre cuando ama con todo su ser: es decir, con su cuerpo, su pasión o sensibilidad y con su alma (con su voluntad espiritual).
[b]Total:[/b] se comparte generosamente todo, “sin reservas indebidas o cálculos egoístas”: “quien ama de verdad a su propio consorte, no lo ama sólo por lo que de él recibe, sino por sí mismo, gozoso de poderlo enriquecer con el don de sí”. La diferencia es esencial: el amor instintivo es posesivo mientras que el voluntario (espiritual) es oblativo.
[b]Fiel y Exclusivo:[/b] “Fidelidad -dice Pablo VI- que a veces puede resultar difícil, pero que siempre es posible, noble y meritoria”. “Siempre es posible”, incluso en los casos de abandono y separación; porque aun en estos casos se puede (y se debe) ser fiel a la palabra empeñada de no amar a ningún/a otro/a que no sea el legítimo cónyuge hasta que la muerte los separe. No puede haber fidelidad verdadera mientras no se la entienda como fidelidad cordial, mental y carnal.
[b]Fecundo:[/b] no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino a estar abiertos a los hijos. Hay matrimonios que no han podido tener hijos a pesar de desearlos ardientemente. Éstos, en su deseo firme y sincero, son fecundos; aunque no logren la fecundidad carnal(11) .

[b]Analiza las bendiciones de una familia numerosa.[/b]
Tener una familia numerosa es una bendición porque esto significa que hay un llamado a la vida terrena constante, que crece nuestra Iglesia Católica y el mundo. No se debe tener miedo a tener una familia numerosa, porque cuando se cultiva en el amor auténtico entonces es una fuente de alegría a pesar de la algunas dificultades económicas. Muchos de los santos han nacido en senos familiares numerosos, por ejemplo, San Ignacio de Loyola tuvo 13 hermanos. Siempre que la familia se ponga en manos de Dios se sentirá mucho más segura para enfrentar todas las dificultades y tomar las decisiones correctas.
Muchas veces es difícil ver lo lindo de tener una familia numerosa porque los esposos no han sabido educarse en el amor auténtico y crecer en él, ya sea porque ignorancia, falta de autoestima, de orientación o por desapego a Dios.
lore857
 
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor lore857 » Mar Sep 28, 2010 3:32 pm

[b]¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?[/b]

Las características del amor conyugal son:
Principalmente debe [b]ser reflejo del amor divino[/b]. A partir de esto tiene 4 características fundamentales:
[b]Plenamente humano:[/b] es decir, al mismo tiempo sensible y espiritual; por tanto, es algo distinto de “una simple efusión del instinto y del sentimiento”, es un acto de la voluntad. El hombre ama como hombre cuando ama con todo su ser: es decir, con su cuerpo, su pasión o sensibilidad y con su alma (con su voluntad espiritual).
[b]Total:[/b] se comparte generosamente todo, “sin reservas indebidas o cálculos egoístas”: “quien ama de verdad a su propio consorte, no lo ama sólo por lo que de él recibe, sino por sí mismo, gozoso de poderlo enriquecer con el don de sí”. La diferencia es esencial: el amor instintivo es posesivo mientras que el voluntario (espiritual) es oblativo.
[b]Fiel y Exclusivo:[/b] “Fidelidad -dice Pablo VI- que a veces puede resultar difícil, pero que siempre es posible, noble y meritoria”. “Siempre es posible”, incluso en los casos de abandono y separación; porque aun en estos casos se puede (y se debe) ser fiel a la palabra empeñada de no amar a ningún/a otro/a que no sea el legítimo cónyuge hasta que la muerte los separe. No puede haber fidelidad verdadera mientras no se la entienda como fidelidad cordial, mental y carnal.
[b]Fecundo:[/b] no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino a estar abiertos a los hijos. Hay matrimonios que no han podido tener hijos a pesar de desearlos ardientemente. Éstos, en su deseo firme y sincero, son fecundos; aunque no logren la fecundidad carnal(11) .

[b]Analiza las bendiciones de una familia numerosa.[/b]
Tener una familia numerosa es una bendición porque esto significa que hay un llamado a la vida terrena constante, que crece nuestra Iglesia Católica y el mundo. No se debe tener miedo a tener una familia numerosa, porque cuando se cultiva en el amor auténtico entonces es una fuente de alegría a pesar de la algunas dificultades económicas. Muchos de los santos han nacido en senos familiares numerosos, por ejemplo, San Ignacio de Loyola tuvo 13 hermanos. Siempre que la familia se ponga en manos de Dios se sentirá mucho más segura para enfrentar todas las dificultades y tomar las decisiones correctas.
Muchas veces es difícil ver lo lindo de tener una familia numerosa porque los esposos no han sabido educarse en el amor auténtico y crecer en él, ya sea porque ignorancia, falta de autoestima, de orientación o por desapego a Dios.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor lore857 » Mar Sep 28, 2010 3:35 pm

[b]¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?[/b]

Las características del amor conyugal son:
Principalmente debe [b]ser reflejo del amor divino[/b]. A partir de esto tiene 4 características fundamentales:
[b]Plenamente humano:[/b] es decir, al mismo tiempo sensible y espiritual; por tanto, es algo distinto de “una simple efusión del instinto y del sentimiento”, es un acto de la voluntad. El hombre ama como hombre cuando ama con todo su ser: es decir, con su cuerpo, su pasión o sensibilidad y con su alma (con su voluntad espiritual).
[b]Total:[/b] se comparte generosamente todo, “sin reservas indebidas o cálculos egoístas”: “quien ama de verdad a su propio consorte, no lo ama sólo por lo que de él recibe, sino por sí mismo, gozoso de poderlo enriquecer con el don de sí”. La diferencia es esencial: el amor instintivo es posesivo mientras que el voluntario (espiritual) es oblativo.
[b]Fiel y Exclusivo:[/b] “Fidelidad -dice Pablo VI- que a veces puede resultar difícil, pero que siempre es posible, noble y meritoria”. “Siempre es posible”, incluso en los casos de abandono y separación; porque aun en estos casos se puede (y se debe) ser fiel a la palabra empeñada de no amar a ningún/a otro/a que no sea el legítimo cónyuge hasta que la muerte los separe. No puede haber fidelidad verdadera mientras no se la entienda como fidelidad cordial, mental y carnal.
[b]Fecundo:[/b] no equivale a tener hijos o muchos hijos, sino a estar abiertos a los hijos. Hay matrimonios que no han podido tener hijos a pesar de desearlos ardientemente. Éstos, en su deseo firme y sincero, son fecundos; aunque no logren la fecundidad carnal(11) .

[b]Analiza las bendiciones de una familia numerosa.[/b]
Tener una familia numerosa es una bendición porque esto significa que hay un llamado a la vida terrena constante, que crece nuestra Iglesia Católica y el mundo. No se debe tener miedo a tener una familia numerosa, porque cuando se cultiva en el amor auténtico entonces es una fuente de alegría a pesar de la algunas dificultades económicas. Muchos de los santos han nacido en senos familiares numerosos, por ejemplo, San Ignacio de Loyola tuvo 13 hermanos. Siempre que la familia se ponga en manos de Dios se sentirá mucho más segura para enfrentar todas las dificultades y tomar las decisiones correctas.
Muchas veces es difícil ver lo lindo de tener una familia numerosa porque los esposos no han sabido educarse en el amor auténtico y crecer en él, ya sea porque ignorancia, falta de autoestima, de orientación o por desapego a Dios.
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor Chel » Mar Sep 28, 2010 5:01 pm

1.- ¿Cuáles son las características del amor conyugal y cómo se pueden vivir?

Es plenamente humano, total, fiel y fecundo.
a) Plenamente humano: sensible y espiritual, acto de voluntad.
b) Total: sin reservas, amando por el gozo del enriquecimiento mutuo, es oblativo.
c) Fiel: exclusivo hasta la muerte, física como mentalmente.
d) Fecundo: estar abierto a los hijos, educarles conforme a la Ley Divina.

2.- Bendiciones de una familia numerosa.

Más bendiciones, a través de los hijos de nuestro Padre Celestial, compromiso de educación cristiana, convivencia familiar en sociedad (ayuda a socializar con responsabilidad), ayuda en las tareas del hogar. Una bendición para la Iglesia y la patria.

Silencio en la mente y Paz en el corazón.
Israel AE
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Re: II. Amor conyugal, amor humano

Notapor jose7882 » Mar Sep 28, 2010 5:22 pm

Soy Jose Luis un saludo a todos.. desde Honduras

¿Cuáles son las caracterísiticas del amor conyugal y cómo se pueden vivir?
R/ Las notas fundamentales del amor conyugal son 4:
a)Es plenamente humano
b) Es total
c)Es un amor fiel y exclusivo hasta la muerte
d) y es fecundo.

Se pueden vivir desde su fuente que es el amor divino, ya que la vocacion al amor brota del Amor supremo que es Dios. Ademas deben vivirse desde la perspectiva del amor oblativo, que se entrega en generosidad por el bien del otro. Y sin olvidar la connotacion principal que es la vida de santidad, por medio de la castidad y de la fidelidad de mente, cuerpo y alma.

Analiza las bendiciones de una familia numerosa.
Bien, si es aqui en Honduras la cuestion esta un poco complicada pero no imposible, y al respecto de lo que dice el Magisterio esta en toda la razon, es de las familias numerosas de donde el Señor saca abundantes vocaciones para su Iglesia. Aun con el esfuerzo que deben de hacer los padres, es en esas familias donde hay mas desprendimiento y generosidad para con La Iglesia. Me parece que las familias que viven mas abierta a los hijos son un semillero de nuevos cristianos y constructores de sociedades jovenes.
jose7882
 
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