por sisterkarlamaria » Dom May 29, 2011 4:14 pm
En relación a La Comprensión
1. ¿Qué es la virtud de la comprensión?
La comprensión es la virtud “que reconoce los distintos factores que influye en los sentimientos o en el comportamiento de una persona, y profundiza en el significado de cada factor y en su interrelación, ayudando a los demás hacer lo mismo, y adecua su actuación a esa realidad”.
Es la facultad de entender los problemas, los comportamientos, las decisiones y las miserias del prójimo, tratando de captar las razones que lo llevaron a las mismas.
2. ¿Para mostrarnos verdaderamente comprensivos, qué debemos hacer?
Lo primero que debemos hacer es olvidarnos de nosotros mismos y empezar a pensar en los demas. El deseo de ayudar al prójimo será el motor principal que nos llevará a desarrollar esta virtud. Nos permitirá hacer los esfuerzos necesarios para ponernos en el lugar del otro y comprender los estados de ánimo de las personas, a quienes, el sólo hecho de sentirse escuchadas y comprendidas las predispondrá a hablar y a sentirse mejor. Esto no solo es comprension, pero tambien caridad. Tenemos una obligacion de ser comprensivos con todos, los conocidos,los extraños, los buenos, los malos, con los que nos hacen favores y con los que nos agravian. La recompensa será, según Dios nos promete, ser tratados el día del Juicio de la misma manera en que habremos tratado a los demás. Y he aqui la clave, seremos juzgados tal y como tratamos a los demas.
3. ¿Cuál es el vicio opuesto a esta virtud? ¿Qué mal nos produce?
El vicio opuesto a la comprensión es la incomprensión, la comodidad de ser egoísta, de ser indiferente a las pesadas cargas del otro. La indiferencia, el rigorismo, el descartar a las personas como cosas es egoísmo e impide la comprensión. El mal que nos trae es el individualismo que lleva al hombre a ocuparse solo de sí mismo, no hay tiempo para ocuparse del otro, ni de dedicarle tiempo, y mucho menos de comprenderlo. Esto es egoismo rotundo.
4. ¿A quién deberíamos imitar para ser comprensivos? ¿Qué ejemplo nos da?
Jesucristo es el modelo por excelencia. El que clavado en la Cruz, aún desangrándose, trató de explicar y excusar ante Su Padre a quienes lo habían crucificado con la plegaria más dulce y suave que jamás se haya escuchado: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”. (Lc. 23,34). Este es sin lugar a dudas, el mejor ejemplo de comprension y de amor.
Por supuesto tambien tenemos a la Reina del Cielo como excelente modelo, ya que Ella tuvo (y es) que ser comprensiva ante tanto odio hacia su Hijo. Ademas Ella es la dulzura misma, a la cual debemos de imitar para ser dulcemente comprensivos.
5. ¿Algún comentario o sugerencia?
No ninguno.
En relación a La Misericordia
1. ¿Qué es la virtud de la misericordia?
La misericordia es “la compasión que experimenta nuestro corazón ante la miseria espiritual o material de otro. Este sentimiento nos induce a socorrerlo material o espiritualmente, sentimos el dolor ajeno y actuamos para ayudarlo. Es el salirnos de nosotros mismos para ir a ayudar al otro (a mi projimo). Es pensar en los demas antes de pensar en mi mismo.
2. ¿Como podemos mostrarnos misericordiosos?
Por nuestras acciones, si tenemos un corazon misericordioso, actuaremos misericordiosamente. Tal y como Dios espera de nosotros. Ponernos en los zapatos del projimo, eso es ser misericordioso.
3. ¿Qué es tener compasión del prójimo?
Es importante recordar que el prójimo no se encuentra en África ni en la India, sino que es el más “próximo” a nosotros. Dios no nos pide que nos ocupemos metafóricamente del “hambre del mundo” sino concretamente del hambriento que nos golpea la puerta. Del que tenemos al lado, enfrente, delante, a la vista, a quien podemos solucionarle el problema del hambre, de la sed, de un trabajo u otra necesidad.
Dios nos pide que le tendamos la mano a quien está a nuestro alcance, no los que viven en otro continente y por quienes seguramente nunca haremos nada. Nuestros prójimos serán los que tenemos codo a codo en nuestra casa, en nuestro barrio, en nuestro círculo de amistades, en nuestra ciudad, y, como máxima extensión quienes viven en nuestra Patria, para no caer en la tentación de evadirnos de nuestra realidad concreta por soñar con enormes empresas que jamás haremos.
Nada más abstracto y menos concreto como acción de misericordia que vivir hablando de nuestra preocupación por el “hambre en el mundo”, por los que “no conocen a Dios” en el África, cuando estamos rodeados de “prójimos” por los “próximos” que están, que tampoco Lo conocen y que también tienen hambre espiritual y material.
La Iglesia nos enseña que las obras de misericordia a practicar son 14: (7 corporales y 7 espirituales).
LAS OBRAS DE MISERICORDIA CORPORALES SON:
Visitar y cuidar enfermos.
Dar de comer al hambriento.
Dar de beber al sediento.
Dar posada al peregrino.
Vestir al desnudo.
Redimir al cautivo.
Enterrar a los muertos.
LAS OBRAS DE MISERICORDIA ESPIRITUALES SON:
Enseñar al que no sabe.
Dar buen consejo al que lo necesita.
Corregir al que yerra.
Perdonar las injurias.
Consolar al triste.
Sufrir con paciencia los defectos del prójimo.
Rogar a Dios por los vivos y difuntos.
4. ¿Cuál es el pecado opuesto a esta virtud, a que nos lleva?
El pecado opuesto a la misericordia es la dureza de corazón, y la crueldad. Nuestra sociedad actual es dura, seca y violenta porque poco o nada de esto existe en general (especialmente las obras de misericordia espirituales), ni se enseña a los niños y jóvenes para que se las practique. En todos los ámbitos de la sociedad tiene puesto el acento no en el prójimo sino en el individualismo exacerbado que arrasa con todas ellas. La propuesta que les llega a través de los medios de comunicación es totalmente materialista y en franca oposición a lo predicado por Cristo.
La dureza de corazon nos lleva a nuestra propia perdicion, pues Jesus mismo nos dijo: "Sed mansos y humildes de corazon", lo cual implica tener un corazon suave, si tenemos un corazon duro, no entraremos en el Reino de los Cielos, a menos a que cambiemos, y le pidamos a Dios que nos ayude a cambiar, a tener un corazon como el de El.
5. ¿Algún comentario o sugerencia?
No ninguno.